febrero 23, 2010

Cat people

Me he dado cuenta de una cosa. Soy parte de una minoría.

Así es, en este México de nosotros que es bastante homogéneo en cuanto a raza, religión etc, etc, yo, una católica de cabello oscuro y ojos cafés, soy parte de una incomprendida minoría.

Soy una “cat person” en una sociedad que ama a los perros. Y no es que no me gusten los perros, me caen re-bien, son lindos, he tenido y convivido con perros y si pudiera me haría de un perro de pastoreo, no sé para qué, porque no es que tenga al rebaño aquí afuera, pero me gustan. La verdad prefiero a los gatos. Se ajustan más con mi personalidad y me la pasó muy bien observando su conducta semi-humana. y recuerdo que nuestros felinos compañeros se encuentran en un nivel de evolución más alto que los perros ya que su cerebro tiene más plieges, según un documental de Discovery Channel que alguna vez pesqué.

Cuando estabamos buscando a Jackie, la Sagrado de Birmania que vive en casa de mis papás o que mis papás viven en su casa, aún no sé bien la diferencia, nos topamos con la realidad de la cultura gatuna en nuestro país. Mientras que en Europa, Canadá e inclusive Argentina, los gatos son vistos como excelentes compañeros por que no requieren tanto cuidado como un perro y son mas o menos independientes y capaces de ajustarse a vivir en espacios pequeños, por ejemplo, un departamento; en México se sigue prefieriendo al perro. El gato no es “criado” y los ejemplares de pedigree son muy pocos. Ni siquiera contamos con un "cat show" decente

Es creencia popular que el gato de pedigree, tiene que ser a fuerza un gato persa, pero eso no es exactamente correcto. Como en los perros, hay muchas razas de gatos, con temperamentos, actitudes y conductas diferentes. Curiosamente, he conocido gente que tiene gatos de raza y ni se enteran, pero han idientificado las características de la raza en su felino.

Hay razas increibles! que nos dejan con la boca abierta. Como los gatos de los bosques de noruega, que pesan 10 kilos y le sacan una cabeza a un gato doméstico y que los escandinavos usaban para cuidar sus granjas y jalar trineos, los rusos azules con su pelaje tan gris que parece azul los siameses que son más listos y hábiles que nada, los ragdoll, que como su nombre lo dice son una muñequita de trapo que se deja cargar, los turkish angora con un ojo verde y otro azul, los sagrados de birmania,reencarnación de una divinidad y los gatos de Bengala que parecen pequeños leopardos urbanos.

En la foto un ejemplar de los bosques de noruega


Hay muchas ideas hasta cierto punto erronéas en cuanto a los gatos y medio me pone de malitas oír que la gente las repita. La primera es que son uraños. Nada más lejos de la verdad, mas bien depende de la raza y de la crianza del animal, para que un gato acepte a los humanos tiene que vivir con ellos en los primeros meses de la vida para que se acostumbren a nosotros.

La segunda, es que son “malos” y no son educables. Por supuesto que lo son!, educables y para nada son malos . Como toda criatura cuya base alimentica inculye taurina, o sea lo que le ponen al red bull, es bueno mantenerlos ocupados porque tienen mucha energía. Dificilmente te darán la patita como un perro, pero aprenden perfecto lo que deben y no deben de hacer, sin embargo, es importante tener en mente que con un gato la relación es de iguales, algo así como un comunismo en el que los humanos proveemos la comida y los gatos cuidan el territorio, o sea la casa. No hay un miembro de la familia/manada alfa como sucede con los perros, a los que los demás le deben obediencia. O sea, si ud tiene un perro, en la mente de su perro ud. es el alpha dude de la casa.

La tercera es que los gatos se van. Bueno se van si los dejas claro está, y lo hacen porque quieren expandir su territorio un poco más, ya saben lo que dicen de la curiosidad y los gatos. El territorio de un león esta dado por lo lejos que se escucha su rugido y es más o menos un kilometro a la redonda. En sus primos domésticos este territorio nuclear es mucho más pequeño, es la casa, lo que haya fuera de esta es una aventura. Un gato con una casa/departamento es feliz, la vida de vagancia no es lo más recomendable ni para nosotros como sus roomies, ni para ellos, porque los peligros de la vida urbana son mucho.

Esta entrada la escribo con mis gatos al lado, Pascal+Watson. Un siamés, demasiado inteligente para su propio bien, super intenso y tierno, pero jamás malicioso como los de la Dama y el Vagabundo(aunque creo que esa historia es tendenciosa ya que la cuentan los perros) y un sagrado de birmania más bueno que el pan y ñoño hasta donde para lo ñoño. Tengo en mente a otras grandes personalidades felinas con las que he tenido el placer de convir, pero de ellos mejor platicamos en otra entrada.

No pretendo que sí ud, mi estimado lector, es un "dog person" cambie su visión y amé a los felinos, pues no, pero ojalá y les haya hecho justicia y los haya presentado bajo una nueva luz y la próxima vez que piense en un felino,no piense en viejitas o en amargetas, sino en grandes mascotas.

Y si ud ya los amaba, o por lo menos simpatiza con ellos, sepa que no está solo. Sip, habemos más "cat people" por ahí y le invito a contribuir en twitter a #catquoteoftheday

1 comentario:

  1. Muy cierto todo lo que escribes. A mí también me gustan los gatos, y la gente piensa que estoy loco. Aún así pienso que son animales muy interesantes. Nomás no hay que volverse como la Crazy Cat Lady que sale en los Simpson.

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